CANSANCIO

Ella se cansó de su mirada,

Él de reprochar la irreprochable,

De continuar esa insensata historia

Se cansaron los dos, era esperable.

De falsas promesas y deseos

Cansáronse los dioses invocados

Y en el mar de las dudas más profundas

Los dejaron a su suerte abandonados.

Embarcados en vanas utopías

Se cansaron las águilas tratando

De emular al cóndor que en su vuelo

Batalla al imposible va librando.

Se cansaron las intrépidas mareas

De querer doblegar el pensamiento

Hurgando en insondables sombras

Descifrar la voz del sentimiento.

Náufragos, sin rumbo a la deriva,

Exhaustos de morir en cada intento

Los encontró moribundos y sangrando

Despojados de todo y sin aliento.

Y cuando al fin llegó la calma de los años,

Los ánimos de otrora apaciguados

Cerrándose la herida de cansancio

Se entregaron a vivir, acostumbrados…

                                                                        DALU